domingo, 14 de febrero de 2010

Cada día que pasa

Cada día que pasa
es otra piedra lanzada
sobre tu muerte anónima,
lo frágil de tu vida
tronchada pluma de viento o de suspiro.
Cada día que pasa
no es día ya ni noche para ti.
Noche sí. Ese negro vacío universal
boca-tripa a descomponer-deglutir toda vida
….Mi bella sinfonía.
Tus notas se han mezclado
con las demás canciones.
Ya no eres mía ni tuya.
El silencio te ha recuperado.


Cada día que pasa…
Y para mí,
es un vacío poblado con tu nombre
la entraña abrasada
del negro universal en el que desapareciste.

(A mi perrita, la bebé,
la que me fue arrebatada sin haber vivido.
Ahora a todos los perros, gatos que me acompañaron
y a todos cuantos no pudieron,
esos que perecen abandonados
por esos mismos “humanos”
que para eso les pusieron en el mundo.
A mi perrita, la que me despertaba cada mañana
saltando a mi pecho
abrazando mi cuello
con sus patitas;
y a l@s que durmieron
de mi cama a los pies
o a los pies de mi cama,
con el mismo afecto la misma ternura;
a mi gatita,
esa que salvé de la calle
y a todos sus compañeros callejeros
que no pude salvar.
Ellos sí son AMARSE IGUAL,
LLAMARSE incluso
de la voz de su amo,
si Abandono, tristísimo nombre,
si Ternura, tan bello.
A todos ellos)